El autismo es la incapacidad que manifiesta un niño para establecer relaciones humanas, incluso con sus propios padres. El niño autista muestra desinterés hacia el mundo exterior y ensimismamiento. Esta patología puede aparecer desde el nacimiento o desarrollarse en los primeros dos años y medio de vida. El niño con autismo se caracteriza por moverse rítmicamente, tiene comportamientos compulsivos, conducta excéntrica y a veces autodestructiva. Suele reaccionar mal cuando se lo alza o se lo toca.
Según el grado de autismo, puede mostrar grandes dificultades en el habla y en el aprendizaje. A veces, se destaca en campos determinados, como memorizar listas o hacer cálculos aritméticos.

 

Tratamiento
El médico recomendará una terapia de estímulos y adiestramiento especial que le permita influir poco a poco en el comportamiento del niño. El fin de la terapia es que logre vincularse más con su entorno y si es posible, que pueda expresarse.
Es probable que el especialista recomiende una asistencia terapéutica a la familia para que aprenda a manejar y sobrellevar al niño autista.

Recomendaciones
La equitación y la música son dos actividades que ayudan, en muchos casos, a los niños autistas a conectarse con el mundo exterior.