La epilepsia es un trastorno caracterizado por la tendencia a sufrir convulsiones recurrentes. Las convulsiones son descargas eléctricas anormales en el cerebro. Cuando este desorden neurológico se manifiesta antes de los dos años, suele estar causado por defectos o lesiones cerebrales –por golpes, o falta de oxígeno al nacer –, desequilibrio en la sangre o fiebres muy elevadas. En algunos casos es difícil establecer la causa de una convulsión. En algunas personas existe una anomalía hereditaria que afecta a las neuronas del cerebro y que puede desembocar en una epilepsia.
Síntomas
• Los ataques de epilepsia se denominan “crisis”. De acuerdo con la intensidad de l crisis puede ser parcial o generalizada y simple o compleja.
De las convulsiones parciales simples
• Contracciones musculares de una parte específica del cuerpo.
• Sensibilidad anormal.
• Pueden presentarse náuseas, sudoración, enrojecimiento de la piel y pupilas dilatadas.
De las convulsiones parciales complejas
• Automatismo.
• Sensibilidad anormal.
• Pueden presentarse náuseas, sudoración, enrojecimiento de la piel y pupilas dilatadas.
• Emociones recordadas o inapropiadas.
• Cambios en la personalidad o agudeza mental.
• Se puede perder o no el conocimiento.
• Alucinaciones o alteraciones olfativas (olor) o gustativas (sabor), si la epilepsia está focalizada en el lóbulo temporal del cerebro.
• Cuando las convulsiones son generalizadas pueden ser de “pequeño mal” o de “gran mal”.
De las convulsiones de “pequeño mal”
• Pérdida repentina y breve del conocimiento o la actividad consciente que puede durar sólo unos segundos, movimientos mínimos o inmovilidad, se repite muchas veces, ocurre más a menudo en la niñez, disminución del aprendizaje (con frecuencia se cree que el niño sueña despierto=.
De las convulsiones de “gran mal”
• Contracciones musculares, incontinencia, pérdida de la conciencia.
• Mordeduras de la lengua o la mejilla, confusión después de la convulsión.
• Debilidad muscular (parálisis de Todd).
Tratamiento naturales
• Como primera medida el médico preguntará si el niño ha tenido convulsiones recurrentes. Si es así, pedirá varios análisis de sangre y exigirá un electroencefalograma para buscar el origen de estas convulsiones.
• El EEG es un análisis que lee la actividad eléctrica del cerebro. En algunos casos, puede indicar la ubicación de una lesión que está provocando convulsiones.
• Cuando el diagnóstico de epilepsia se confirma, el médico seguramente recetará un anticonvulsionante para uso preventivo y a largo plazo.
• Las personas con epilepsia pueden ayudar a controlar sus ataques llevando una dieta balanceada, tomando regularmente los medicamentos recetados, manteniendo su ciclo normal de sueño y un balance emocional. La visita médica periódica es fundamental.
• Comentarios de varias personas que han tratado la epilepsia infantil con mucho éxito y en poco tiempo, tomando la sangre de un pajara andino peruano llamado TIRO, combinada con vino tinto.
Recomendaciones
• Es importante que los padres informen al personal de la escuela sobre la condición del hijo, y qué hacer frente a una crisis epiléptica.
• Se recomienda el uso de una placa informativa sobre la condición del niño y pasos a seguir frente a una convulsión.
¿Qué hacer frente a un ataque de epilepsia?
• Aleje los objetos con los que el niño pueda golpearse.
• Desabróchele la ropa que pueda oprimirle el cuello.
• No intente introducirle nada en la boca para evitar que se muerda la lengua.
• No busque sujetar los miembros en convulsión.
• Quédese al lado de él.
• Una vez que haya pasado la convulsión:
- Acomódelo en la posición de recuperación.
- Límpiele suavemente la espuma de la boca.
- Déjelo tranquilo.
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