Cuando el niño nace antes de las 37 semanas se le llama “prematuro”. El niño prematuro nace con una “inmadurez” de sus órganos y sistemas (respiración, control de temperatura, digestión, metabolismo, etc.) esto le hace más vulnerable a las enfermedades y más sensible a los agentes externos (luz, ruido, etc.) pesan menos de 2.5 kg y su talla es escasa. No todos los niños prematuros van a presentar los mismos problemas. Por debajo de 35 semanas necesitan apoyo adicional para sobrevivir fuera del útero materno, por lo que deberán ingresar en una Sala de Neonatología. Hay que tener en cuenta que la gravedad de los problemas esta en relación a la edad gestacional. Entre las situaciones que ocasionan un parto prematuro podemos citar; estaciones múltiples, madres adolescentes, factores genéticos (hereditario), diabetes, hipertensión arterial, consumo de alcohol y tabaco, etc.
Recomendaciones:
- Su desarrollo posterior es normal, y en su juventud no difieren de cualquier otro joven.
- Durante los primeros años de vida; podemos encontrar en estos niños algunos problemas de salud, hay que conocer el problema que presentan para ayudarlos a superar.
- Hay que bañarles con cuidado ya que su piel es más frágil y su sistema inmunitario menos maduro.
- Masajearles todos los días durante los primeros meses para facilitar una unión más intensa y un mejor desarrollo de sus reflejos.
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